La paloma de Noe

Estaba nadando con mis hijos

cuando una paloma se acercó

con una rama en sus picos.

Cruzaronse nuestros reales ojos

en un reconocimiento de altezas profundas,

Dijome en lenguas olvidadas, 

aquellas que sólo conocen los muertos.

Te traigo este presente

dueño y señor del agua

Se que te gustan las ramas

pues me lo dijo una bella dragon dama

A cambio

¿Puedo hidratar mi reseca graganta?

Mi dominio y su mirada cerraron el trato

depositó el pago y bebió

la paloma se fue y la rama quedó

Una señal diría Noe.

y yo digo, que a mi,

la naturaleza, 

me es fácil entender.

El aroma de los hijos.

 

Todos estos años temiendo

que el padre de mis hijos

se estaba muriendo.

Y lo que no percibía

es que eran ellos,

mis inocentes niños,

que al hacerse mayores morían.

Amor que con el tiempo partía,

dejando tras de si,

aromas dulces de travesía.

Esfuerzo.

Acaecía un día soleado,

de solidarios eventos,

una historia, estad atentos,

con un protagonista cansado.

Corrió un maratón,

con sus amigos no paró,

sin obligación entrenó.

Todo él era un sofocón.

Vital prueba le quedaba.

Inglés después tenía,

su cuerpo asistir odiaba.

Gran esfuerzo requirió,

y aunque nadie lo pronosticaba,

a clase de inglés entró.

Maya

Me encontraba yo comprando

cuando una abeja me molestaba.

Mientras me preguntaba si la espantaba,

me sorprendió susurrando...

"Nadie me está escuchando,

te ví distinto y me preguntaba

si este buen mozo me ayudaba,

aire fresco estoy buscando.

Es tal ya mi tortura,

que temo dejarme clavada

en un arrebato de locura"

Para evitar tamaña herida,

la acompañé con premura,

a la puerta de salida.

Cruzado

Saber me gustaría
la razón de ser diestro
no hallaré mucho maestro
pues lo ignora mayoría.

Qué poder te guiaría
para imponerte sin miramientos
¡oh! emisferio siniestro
una tarde de temprano día.

¿Obligado fui sin más?
¡Los zurdos eran deshecho!
¿Torturado en otra vida quizás?

Algo hubo sospecho
pues yo de piernas
no soy derecho.

Lucha interior

Su mirada fija en la pantalla
sufro porque no le va a dar tiempo
él sigue pegado al asiento
viendo alguna que otra batalla.

Una fuerza interior me carcome
¡agarraló de las orejas!
me susurran un par de viejas
Pero alguien desde dentro sujetome.

La guerra no está fuera.
Parca que me envolviste con tu manto,
¿acaso quieres que muera?

Ni Dios oye mi llanto
clavoseme daga certera
lo calmaré con este canto.

Turbación

        Sólo Dios sabe cómo
        un día aparece en vida
        dejando profunda herida
        algo atraviesa el lomo.

        No es Roma ni Romo.
        un alma, quizas perdida,
        de una época querida,
        o de un no te perdono.

        Tal vez quiera ayudar,
        o estará en su intención,
        molestar quizás odiar.
        (no es clara su misión)

        Sea cual sea su condición,
        el deber es ayudar,
        a un alma en turbación.

        (intentándola salvar)